jueves, 14 de diciembre de 2006

Indios metafisicos.


Parcialmente ebrio, o totalmente bebido, escribo esta nueva entrada a las once y diez de Londres. Ha sido un día intenso. Localizaciones al estilo british. Como ayer, pero peor, porque nos pilla cansados. Vamos a ver un sitio cojonudo: dos horas de furgo como dos toneladas de mercurio. Vamos a ver el siguiente: otras dos simpáticas horas. En el camino me agobio, me duermo, me pongo histérico, todo a la vez y sin intervalos. Cuando llegamos a las localizaciones, de pronto a todo el mundo le entra una prisa de la hostia: hay que resolver las secuencias en segundos. Encontramos una idea genial que resuelve mil problemas, casi sin darnos cuenta. Intento que la alegría no se me note para parecer profesional. La casa de miss Eagleton es una sobrada, es un placer de localización. Tiene de todo y más. Doscientos cincuenta kilómetros de viaje hasta la siguiente localización. Momento ultra-mítico en un hospital en quintalapolla, a mil horas del centro: el indio metafísico. El que cuida el hospital, cerrado por reformas, o por no sé qué, lleva dieciochomil llaves en el bolsillo. Es la tercera o cuarta vez que venimos, pero parece que es la primera. El indio sonríe, feliz. Queremos entrar en el maldito Squash court. Saca su mega-manojo de llaves imposible y NO TIENE LAS LLAVES del sitio que queremos ver. Y el indio desapaprece buscando la llave en la distancia, veo su oficina a tres kilómetros. El indio vuelve y no trae la llave porque la ha perdido. Para entrar tenemos que dar una patada a la puerta, yo me hago daño en el tobillo, y encima el sitio no mola, no encuentro los corridors de los cojones. Pienso diferentes maneras de matar al indio, con torturas, a palos, a mordiscos, con pellizcos intermitentes en los huevos. Como siempre, al final le cojo cariño y le hago unas fotos. Aquí podéis disfrutar de su aspecto absurdo, de su pedazo de personalidad, de su humanidad a flor de piel. El indio mítico. Llego al hotel hecho una auténtica braga usada y meada. Me quiero ir a la cama y pensar en el dolor de pies que me posee, pero tengo que ir a cenar con unos profesores de universidad encantadores y convencerlos de que animen a sus alumnos para que vayan de figuración a la secuencia de la conferencia de John Hurt en el college, porque literalmente no tenemos dinero ni ganas de pagar a tanta gente. Me mamo con vino tinto, lo peor, rollo repugnante, y termino hablando de Douglas Sirk y Vertigo y Escrito en el viento y las películas americanas de Fritz lang y de Ophuls y de películas que no he visto. Parezco un contertulio de Garci en los buenos tiempos, pero con los carrillos colorados. Parezco Bob Esponja borracho de helado de nata en el local de Goophy Goover. Dios bendiga el cine y la vida en general, porque todo esto es asombrosamente posible. Asi ha ocurrido y así se lo hemos contado.

10 comentarios:

Anónimo dijo...

Cuando estes en la furgoneta y el agobio te llegue y te entre la menopausia y no puedas soportarlo más, piensa que aqui unos cuantos gilipollas dariamos un huevo por estar en esa puta furgoneta, localizando exteriores para hacer una pelicula.

Viva el cine cabrón, disfrutalo tu que puedes...

Anónimo dijo...

Se me ha olvidado firmar el mensaje de arriba.

Soy Moo.

Anónimo dijo...

Aquí hace un frío del copón. Es que estoy leyendo tu blog SIN calefacción, tío. ¿Para cuándo una película con Christopher Lambert?

...La Señora Mayor dijo...

Moo, TU VAS A ESTAR EN ESA FURGONETA POR MIS SANTOS HUEVOS.
te espero.
febrero o marzo, ahí te veo.

Anónimo dijo...

Cuando leía lo de borracho en la cena... me he descojonado. Son momentos épicos cuando te acuerdas. No sabes si les has caído bien o no quieren volver a verte.

Si pilla bien la fecha el foro se multiplica y haremos una gran masa de extras.

Anónimo dijo...

Ese indio hindú cargado de llaves se merece una teleserie de misterio, de ésas de arte y ensayo puro y duro, entre David Lynch, Satoshi Kon y Antonio Mercero.

Dani Lebowski dijo...

Viva usted y este santísimo blog.

Un abrazote, suerte.

Dani Lebowski

Anónimo dijo...

joer álex, parece que estás pasando un calvario en vez de hacer una película. muchos ánimos y no desfallezcas!!!!!!! petons desde barna.

Unknown dijo...

Imposible evitar leer tus post cargados de vulgaridad y sencillez. Simplemente maravillosos!
Desde argentina, saludos a todos.
Candelaria

Moriarti dijo...

Mas de un profesor de la Escuela Andaluza de cine, deberia de tomar clases de este blog...

He dicho escuela de cine... mas bien esto parece un local con dos camaras reventadas...

Que tengas un sobervio dia de curro Señora mayor!!!

Letters from Seville.